Si hay algo que enamora de Almería, además de sus paisajes de película y su costa infinita, son sus pequeños pueblos llenos de encanto. A veces parece que se han detenido en el tiempo, con callejuelas estrechas, casitas blancas y gente dispuesta a regalarte una sonrisa. Hoy os traigo una lista con los 10 pueblos más interesantes de esta provincia, ideal para que organizáis una buena ruta y descubráis lo mejor de Almería. ¡Vamos allá!
1. Mojácar
Empecemos por uno de los grandes clásicos: Mojácar. Este precioso pueblo está situado sobre una colina y destaca por sus bonitas casas blancas. Mojácar es de esos sitios que te atrapan desde el primer momento. Sus calles estrechas te invitan a perderte mientras descubres plazas y rincones con encanto que parecen sacados de una postal. Además, por suerte está a un paso de Mojácar Playa, donde hay que pegarse un chapuzón.
Consejo viajero: Sube hasta el mirador de la Plaza Nueva para disfrutar de unas vistas espectaculares del Valle de las Pirámides.
2. Níjar
Níjar, el municipio más grande de la provincia de Almería, se extiende desde Sierra Alhamilla hasta Cabo de Gata, ofreciendo una gran diversidad de paisajes. Es famoso por sus playas, su núcleo urbano de origen árabe y, sobre todo, por su rica tradición artesanal. La artesanía de Níjar incluye productos de cerámica, jarapas y esparto, con influencias fenicias y árabes. Los artesanos locales aún elaboran piezas de cerámica en talleres tradicionales, mientras que las jarapas, coloridas telas de origen musulmán, y el esparto, usado para cestas y decoraciones, siguen siendo populares. Los visitantes pueden ver a los artesanos trabajar y adquirir estos productos locales.
Si eres fan de los espacios naturales: Níjar es la puerta de entrada al Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, uno de los paraísos más salvajes y vírgenes de la costa española. Se trata de una parada obligatoria.
3. Vélez-Blanco
Cuando llegáis a Vélez-Blanco, lo primero que os recibe es su imponente castillo renacentista, que parece vigilar el pueblo desde lo alto. Este pueblo es historia pura, con su castillo, sus iglesias y sus casas señoriales. Es rico en yacimientos arqueológicos, como la Cueva de Ambrosio (Neolítico) y la Cueva de los Letreros, donde se encuentra la famosa pintura del “Indalo”, símbolo de Almería.
Dato curioso: El patio del Castillo de Vélez-Blanco se expone en el Museo Metropolitano de Nueva York. ¡Una joya que cruzó el charco!
4. Sorbas
Sorbas es de esos lugares que parecen desafiar las leyes de la física. Este pueblo se encuentra literalmente colgado sobre el borde de un barranco, con las casas asomándose al vacío. Pasear por sus estrechas calles es una experiencia única.
Para los amantes de la espeleología: las Cuevas de Sorbas son otra parada obligatoria. Estas formaciones subterráneas son un espectáculo para los ojos, con estalactitas y estalagmitas que os dejarán con la boca abierta. Pero lo más llamativo son las paredes, cubiertas de cristales de yeso que brillan con la luz. Visitar las Cuevas de Sorbas es una aventura accesible para todos, con rutas que permiten explorar sus pasadizos y galerías.
5. Carboneras
Este municipio del litoral levantino almeriense, dentro del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar, destaca por su paisaje árido, semidesértico y volcánico. Aunque es conocido sobre todo por sus playas, como la famosa Playa de los Muertos una de las más espectaculares de España, Carboneras tiene mucho más que ofrecer.
Es el primer espacio protegido andaluz terrestre-marítimo, con montañas volcánicas, una franja costera con dunas, playas, salinas y una milla marina de gran riqueza. El pueblo, originado en el siglo XVI con la construcción del Castillo de San Andrés, es un conjunto de casas blancas junto al mar, ideal para disfrutar del sol, la playa, la tranquilidad y un clima excelente.
Si te gusta la naturaleza: Carboneras es también una excelente base para explorar el Cabo de Gata.
6. Lucainena de las Torres
Lucainena de las Torres, situada en Sierra Alhamilla y dedicada tradicionalmente a la agricultura, especialmente a la uva, tiene un rico pasado histórico. Este pequeño pueblo está rodeado de sierras y valles que parecen no tener fin. Es perfecto para perderse entre sus casas blancas y disfrutar de una tranquilidad que a veces es difícil de encontrar.
Plan muy recomendable: hacer la Vía Verde de Lucainena, una ruta que sigue el antiguo trazado ferroviario y que os permitirá descubrir paisajes impresionantes.
7. Laujar de Andarax
En plena Alpujarra Almeriense encontramos Laujar de Andarax, un pueblo rodeado de montañas, olivares y viñedos que forman parte del club “Pueblos más Bonitos de España”. Es un lugar lleno de historia y cultura, con una rica herencia morisca que se refleja en su arquitectura y en su gastronomía. Además, desde aquí parten rutas de senderismo que te llevarán a descubrir la belleza de la Sierra Nevada almeriense.
Para los amantes del buen vino: Laujar de Andarax es una parada obligatoria, ya que es una de las zonas vitivinícolas más importantes de Almería.
8. Tabernas
Cuando hablamos de Tabernas, no podemos dejar de mencionar su famoso desierto, el único desierto propiamente dicho de Europa. Pero además de los paisajes áridos que parecen sacados de una película del Oeste, este pueblo tiene su propio encanto. Aquí encontrarás el Oasys MiniHollywood, un parque temático que os transportará directamente a las películas de vaqueros que se rodaban en la zona. Ideal si os encantan las películas de vaqueros o viajáis con niños.
Para senderistas: el desierto de Tabernas es un lugar increíble para hacer rutas de senderismo y descubrir un paisaje completamente distinto al resto de la provincia.
9. Serón
Serón es famoso por sus deliciosos jamones serranos, pero este pueblo ofrece mucho más. Situado en plena Sierra de los Filabres, Serón es ideal para los amantes de la naturaleza, con rutas de senderismo que os llevarán a descubrir paisajes verdes y frondosos. Su casco antiguo es un lugar perfecto para perderse y disfrutar de la tranquilidad de un pueblo típico andaluz.
Apunte gastronómico: No os olvides de probar el jamón de Serón, ¡os aseguro que no os arrepentiréis!
10. Alhama de Almería
Este municipio, de origen árabe, se asienta en una atalaya con vistas al Valle del Andarax y presenta el típico trazado urbano almeriense con calles estrechas y casas sin tejado. Entre sus atractivos destacan el café La Tertulia, la Iglesia de San Nicolás y un puente de origen romano. Aunque vinculado a la época musulmana, se han encontrado restos romanos. Tras la expulsión de los moriscos y años de abandono, resurgió en el siglo XIX gracias a la minería y la agricultura, impulsando el cultivo de la uva de Ohanes y la construcción de un balneario.
Famosa por su gastronomía: Entre sus platos más destacados se encuentran embutidos, carnes y guisos. También destacan sus dulces, como los roscos de Semana Santa o los mantecados de miel y rosquillas.