Jávea es una localidad con mucho que ofrecer. Su privilegiado entorno natural la convierte en un destino perfecto para unas vacaciones en familia con las actividades al aire libre como protagonistas. Las playas y calas de Jávea son perfectas para adentrarse en la belleza del Mediterráneo y conocer su imponente diversidad natural.
Los acantilados de los 20 kilómetros de litoral de Jávea acogen en sus rincones algunas de las playas y calas más impresionantes de la costa levantina. Todo un catálogo de paraísos naturales en los que perderse para huir de la rutina y el ajetreo del día a día. Hoy te traemos una selección de las mejores opciones para que no descubras porque unas vacaciones en Jávea tienen mucho que ofrecer.
Además, los cuatro cabos que salpican la geografía de Jávea son el hogar de miles de especies marinas que encuentran en esta costa rocosa un hábitat rico y diverso. Por eso, tanto las excursiones por el interior como las inversiones de submarinismo, permiten conocer y disfrutar la belleza de sus paisajes.
Playas de Jávea
Playa del Pope
Aunque ya no existe playa como tal debido a la acción erosionante del mar, un baño en sus aguas es todo un espectáculo. Se trata de uno de los secretos mejor guardados de la costa de Jávea, en el que los cormoranes son los protagonistas absolutos.
Una vez pasado el puerto deportivo, a los pies del Cabo de San Antonio, este espacio supone el comienzo de la Reserva Marina más importante de la zona, compartida entre Jávea y la vecina Denia. 900 hectáreas que forman parte del Parque Natural del Montgó en cuyos fondos marinos se encuentran especies como corales, posidonias oceánicas, meros, doradas o pulpos. Todo tesoro para los amantes del submarinismo.
Playa la Grava
Se trata de la playa urbana de la ciudad, muy cercana al puerto deportivo y pesquero. Es una playa de piedras, muy bien cuidada en la que el oleaje moderado hace que sea una opción perfecta para un día en familia. Es recomendable contar con un calzado adecuado para poder disfrutar del baño sin preocupaciones.
Es una de las playas de Alicante que cuenta con el distintivo de la bandera azul que certifica la calidad de sus aguas y de los servicios y accesos. Cuenta con vigilancia marítima por parte de los socorristas de la Cruz Roja, así como de un gran número de restaurantes y locales de ocio.
Playa del Benissero
El lugar perfecto para disfrutar de las actividades náuticas, al encontrarse en un punto de costa abierto, lo que la expone a los mejores vientos de la zona para practicar deportes como el kitesurf, el windsurf o el paddle surf. Es la laya más extensa de Jávea con unos 2 km de longitud, lo que garantiza un nivel de ocupación no demasiado alto.
Además, el Benissero cuenta con una amplia gama de servicios como tumbonas y sombrillas, parkings y chiringuitos de madera perfectamente integrados en el entorno. En los alrededores de la playa también se pueden encontrar diferentes restaurantes para disfrutar de la cocina tradicional de Alicante.
Calas de Jávea
Cala del Ministro
Al final de la playa del Benissero se encuentra esta pequeña cala en la que las rocas son las protagonistas. Al lado de la cala se pueden visitar los restos históricos conocidos “banys de la reina”, vestigios del asentamiento comercial del Siglo I a.de C., dedicado a la elaboración de salazones.
Este espacio no cuenta con chiringuitos ni restaurantes, por lo que es recomendable preparar algo de picar antes de visitarla. Sus aguas cristalinas y la tranquilidad de su entorno hacen de esta cala un lugar perfecto para desconectar del bullicio y disfrutar de un relajante baño en sus aguas.
La Caleta
También conocida como la Cala Blanca, este espacio está formado por dos calas contiguas que se comunican. En su entorno se alternan la piedra blanca y la roja, dando lugar a un paisaje inconfundible con vistas al Macizo del Montgó.
Esta cala cuenta con una longitud de unos 300 metros y es uno de los lugares más recomendables para practicar esnórquel, gracias a sus aguas cristalinas, perfectas para observar el gran número de especies marinas que la habitan. Aunque no cuenta con servicios hosteleros en la propia cala, muy cerca podréis encontrar restaurantes y chiringuitos típicos.
Cala la Granadella
Situada a 11 km del centro de Jávea, esta cala también reúne las condiciones ideales para la práctica del esnórquel y el submarinismo. Sus fondos están plagados de una gran variedad de especies animales y vegetales típicamente mediterráneos.
La ocupación de este espacio suele ser alta, por lo que es recomendable llegar pronto por la mañana para conseguir un sitio. El acceso está controlado, por lo que si no sois muy madrugadores es posible que no podáis disfrutar de ella. Aunque se trata de un paraje natural único, en los alrededores de la cala encontraréis restaurantes, un parking y servicios de alquiler de tumbonas.
Las playas y calas de Jávea son, sin duda, una de las mejores excusas para acercarse a conocer esta preciosa localidad alicantina en la que el ocio y la naturaleza se combinan para ofrecer una oferta turística incomparable.
En Vacalia encontrarás una amplia variedad de alojamientos vacacionales cerca de Jávea para disfrutar de unos merecidos días de desconexión en las aguas cristalinas de las playas y calas de Jávea.