El mes de noviembre en Ibiza muestra una versión de la isla que muchos viajeros no conocen. La isla se convierte en un lugar donde la tranquilidad del otoño te permite descubrir tradiciones ibicencas como la que hoy os vamos a contar.
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El renacimiento de una tradición casi olvidada
La “Trencada de Pinyons” es una antigua costumbre que, tras haber caído en el olvido durante años, ha resurgido con fuerza en los últimos tiempos. Los ibicencos hacen un gran esfuerzo por preservar su herencia cultural, y una de las mejores maneras de hacerlo es compartiéndola con los visitantes. Así, no solo mantienen viva su rica historia, sino que también ofrecen una visión alejada de los circuitos turísticos convencionales y más cercana al verdadero espíritu de la isla.
Cada año, en la víspera del 1 de noviembre, Ibiza se prepara para celebrar el “Día de Tots Sants”, una fecha dedicada a recordar a los seres queridos que ya no están.
Antiguamente, los niños de Ibiza recorrían las calles al caer la tarde, llamando a las puertas de las casas para pedir piñones, dulces y frutos secos. Tras recibir sus pequeñas recompensas, se reunían con sus familias alrededor de la mesa, donde, entre risas y relatos de brujas y fantasmas, compartían una noche especial.
Antes de acostarse, se dejaban las cáscaras y una vela en una mesa durante toda la noche para honrar a sus difuntos. Esta tradición se convirtió en una de las celebraciones más esperadas del año.
Hoy en día, familias y amigos se reúnen para recolectar y comer frutos secos de la temporada. En la Ibiza rural, esta costumbre simbolizaba la unión familiar a través de compartir de los alimentos recogidos. El simple acto de partir los frutos secos, de donde proviene el nombre «trencada» (que significa “romper” en catalán) constituía el núcleo de esta tradición.
Aunque esta actividad estuvo a punto de desaparecer, ha vuelto con fuerza en los últimos años, impulsada por el interés local en preservar las costumbres y compartirlas con quienes visitan la isla. Esta experiencia ofrece a los visitantes una visión distinta de Ibiza, alejada de los típicos paisajes de playa y fiesta, y más cercana a sus raíces culturales.
La versión ibicenca de Halloween
La “Trencada de Pinyons” se podría considerar como una respuesta de Ibiza a las celebraciones de Halloween. Mientras en otros lugares se han instalado los disfraces y calabazas, en Ibiza se prioriza el valor de compartir y recordar a los difuntos. Tradicionalmente, los piñones recolectados se utilizaban en las familias para elaborar dulces típicos del Día de Todos los Santos. Sin embargo, en la actualidad, la preparación de estos dulces se ha trasladado principalmente a las pastelerías locales, que han rescatado antiguas recetas familiares.
Esta fiesta colectiva ha evolucionado, organizándose cada vez más como una jornada festiva completa, que incluye no solo la recolección, sino también música en directo y actividades culturales.
Esta festividad, celebrada entre el 31 de octubre y el 2 de noviembre se ha convertido en una cita ineludible para quienes buscan descubrir una Ibiza diferente, conectada a sus antiguas tradiciones y valores familiares.
Los piñones no son solo unas semillas, son parte de una tradición que simboliza la unión familiar. Además de frutos secos, en las mesas se servían platos como la “frita de porcella” (un guiso de cerdo) o buñuelos de viento (una especie de rosquillas). Hoy en día vuelve a ser típico degustarlos durante estas fechas.
En pueblos como Sant Llorenç de Balàfia, la Trencada ha vuelto a ser una fiesta muy importante, donde además de la recogida de piñones, también se organizan talleres donde puedes aprender recetas tradicionales de la isla y participar en una gran comida comunitaria, donde toda la población comparte platos hechos con ingredientes de Ibiza.
La almendra de Ibiza, una de las mejores del mundo
La almendra ha sido durante mucho tiempo uno de los productos estrella de la isla, especialmente en la preparación de los famosos panellets de almendra y piñones, unos dulces también típicos durante estas fechas.
En el pasado, Ibiza exportaba toneladas de almendra a nivel nacional e internacional, siendo una fuente importante de ingresos para la isla. Sin embargo, con el paso del tiempo, muchos de los almendros han envejecido y su producción ha disminuido considerablemente.
A pesar de esto, en los últimos años ha habido un esfuerzo para revitalizar la producción de almendra en Ibiza. El Consell Insular de Eivissa ha trabajado junto con agricultores locales para implantar nuevas técnicas de cultivo y asegurar que la almendra ibicenca vuelva a ser un ingrediente importante tanto en los mercados locales como en los productos que se consumen en la isla.
Si visitas Ibiza en noviembre, la “Trencada de Pinyons” es una oportunidad perfecta para conocer una versión de la isla que pocos ven. En esta época, la isla es más tranquila y menos turística, lo que te permite disfrutar de sus hermosos paisajes y descubrir su rica cultura.
